Friedrich Nietzsche
Una visión espiritual desde una postura y visión distinta
Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos
No que me hayas mentido, que ya no pueda creerte, eso me aterra.
La mentira más común es aquella con la que un hombre se engaña a sí mismo.
La exigencia de ser amado es la máxima arrogancia.
Todo idealismo frente a la necesidad es un engaño
El individuo ha luchado siempre para no ser absorbido por la tribu. Si lo intentas, a menudo estarás solo, y a veces asustado. Pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo
Todo lo que se hace por amor, se hace más allá del bien y del mal.
En el amor siempre hay algo de locura, mas en la locura siempre hay algo de razón.
Una conciencia amaestrada es aquella que nos da un beso a la vez que nos muerde
El hombre es algo que debe ser superado
Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado
No prestar atención ni al mejor de los argumentos en contra de una decisión ya adoptada constituye una muestra evidente de un carácter enérgico. Ello incluye también una voluntad de llegar a la estupidez
Pues hasta la curiosidad y el espanto terminan por cansarse
Aquel que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los 'cómos
Lo que no me mata, me fortalece
Sin música la vida sería un error
No existen fenómenos morales, sino sólo una interpretación moral de los fenómenos
Cuando se acaba de ofender a nuestro orgullo, es cuando más difícil resulta herir nuestra vanidad
El sexo es una trampa de la naturaleza para no extinguirse
La voluntad de vencer una pasión no es , en último término, más que la voluntad de tener una o varias pasiones distintas
El que lucha con monstruos ha de tener cuidado de no convertirse también en un monstruo
El hombre, en su orgullo, creó a Dios a su imagen y semejanza
La maldad es rara. La mayoría de los hombres están demasiado ocupados por ellos mismos para ser malos
Corremos más peligro de que nos atropellen cuando acabamos de esquivar un vehículo
El pensador sabe considerar las cosas más sencillas de lo que son
El mundo real es mucho más pequeño que el mundo de la imaginación
Toda convicción es una cárcel
No me entienden; yo no soy la boca que sepa llegar a esos oídos
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